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La Legislatura aprobó la venta de la ex sede de la Comuna 12

La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó este jueves 5 de diciembre la autorización para la venta de una treintena de inmuebles pertenecientes al Gobierno porteño, entre los cuales se encuentra el edificio de la ex Sede de la Comuna 12, situado en Miller 2751. La norma es de doble lectura, por lo que deberá ser sancionada nuevamente, previo paso por la audiencia pública.

 

 

Dentro de ese proyecto de ley, el nº 2924, se encontraba también otro terreno en Villa Urquiza: el de Galván 3463. En ese predio funcionó durante un tiempo la sede del Consejo Escolar Nº15, donde se realizaban tareas administrativas, y anteriormente había existido allí incluso un jardín de infantes para mujeres. 

 

El proyecto contó con 42 votos, de miembros del oficialismo y sus aliados, mientras que 14 legisladores votaron en contra. Esta fue una sesión particular del cuerpo legislativo, ya que fue la última antes de que comience el mandato de los 30 nuevos diputados porteños y venza el de los que ingresaron en 2015.

 

En la sesión, hubo distintos puntos de vista sobre el proyecto. La legisladora oficialista Paula Villalba, que lideró el proyecto, sostuvo que la venta servirá para “llevar adelante una política de austeridad respecto al patrimonio inmobiliario porteño, evitando erogaciones innecesarias y para poder generar fuentes de financiamiento que no comprometan el presupuesto corriente ni aumentar la carga impositiva de los contribuyentes”. El dinero recaudado, prometió la diputada de Vamos Juntos, será utilizado para "inversiones de gasto de capital". Argumentos similares había esgrimido el Poder Ejecutivo al enviar la propuesta de ley.

 

Por su parte, el legislador Carlos Tomada, de Unidad Ciudadana, sostuvo que “estos proyectos son una falta de respeto”.  Con esta aprobación, afirmó el peronista, "la Ciudad sufre una verdadera descapitalización". En tanto, el dirigente relativizó el argumento sobre el futuro de los fondos esgrimido por Villalba, ya que sostuvo que "eso no puede ser evaluado". "Queda destinado meramente a confiar en la buena voluntad del Gobierno de que va a ser así", agregó.  

 

Desde el Frente de Izquierda, la legisladora Laura Marrone calificó a los proyectos destinados a la venta de terrenos como "una estafa". "No es cierto que los bienes vayan a la VIlla 31“, agregó. En un mismo tono, Marta Martínez, de Autodeterminación y Libertad, señaló que con este tipo de proyectos “se deciden privatizaciones que le dan la espalda al interés público”. Al mismo tiempo, agregó que "cada vez que se desafecta un bien público, es para hacer negocio inmobiliario”. 

 

En uno de los considerandos del proyecto, la Ciudad estimaba que "el dinero conseguido será utilizado para el desarrollo de obras de infraestructura, salud, educación, seguridad, vivienda, transporte público, movilidad sustentable", entre otros. No obstante, también se destacó que "será el Poder Ejecutivo el que determinará las formas de pago y el financiamiento, de acuerdo a las condiciones de mercado".

 

De esta manera, quedó descartada la posibilidad de realizar un Jardín Maternal en el edificio de Miller, propuesta que había sido presentada por iniciativa del comunero Matías Debesa, por el bloque de la UCR. Ese sector ahora será parte del oficialismo.